Pues si que sale caro contratar a Mariah Carey. La cantante recibió la suma de un millón de dólares por cantar cuatro canciones en una fiesta privada de fin de año. El afortunado que pudo pagar dicha cantidad y que se deleitó con la voz privilegiada de Mariah fue el hijo del dictador libanés Gaddafi.
La actuación tuvo lugar en el Nikki Beach Club en la isla caribeña de St Barts. La cantante contó con la compañía de su marido desde hace 8 meses Nick Cannon y los raperos de Jay-Z y Timbaland que también actuaron en la fiesta.
Por lo visto todos disfrutaron de champán y ostras a mansalva. Una buena manera de despedir el año…
La actuación tuvo lugar en el Nikki Beach Club en la isla caribeña de St Barts. La cantante contó con la compañía de su marido desde hace 8 meses Nick Cannon y los raperos de Jay-Z y Timbaland que también actuaron en la fiesta.
Por lo visto todos disfrutaron de champán y ostras a mansalva. Una buena manera de despedir el año…