La actriz casada con Ashton Kutcher está decidida a adoptar después de haberse sometido a varios tratamientos de fertilidad sin dar resultado, según el periódico National Enquirer. Al parecer prefieren que el bebé sea un niño para según bromeó Demi: “contrarrestar el nivel de estrógenos”, ya que su maridito a veces se siente “agobiado” por estar rodeado de “tanta mujer en casa”.