
La platea desconcertada fue testigo de las caras de Nito Artaza quien deslizó “bajemos un cambio porque de lo contrario tendré que... cortar la función”. Bajado el telón, el conflicto continúo tras bambalinas. Ritó sufrió una crisis de nervios. “No voy a soportarlo más, es una falta de respeto para todos. Lo frenan o renuncio”, habría gritado la actriz antes de ser contenida en su camarín por su marido. Por otro lado, Artaza y Carlos Evaristo, director de la obra, se encerraron a hablar claro con Perciavalle. Luego de algunos minutos, y mientras el público de la segunda función comenzaba a tomar ubicación en la sala, se acercó al camarín de Carlos para apaciguar las aguas. El trabajo continuó con total normalidad, pero al finalizar, antes de retirarse del teatro, María y Carlos continuaron con la guerra de gestos e indiferencia.