
“Nosotros teníamos una relación hermosa de tres años, pero no era un noviazgo normal de dos personas que se van a casar. Acá yo dejaba demasiadas cosas… y se sumaron muchos miedos que uno va viviendo sobre la marcha. En la convivencia nos dimos cuenta que muchas cosas de pareja, íntimas, normales del día a día, no eran... como esperábamos. Fue bueno verlas cuarenta días antes de casarnos, y no cuarenta días después".
Sobre quién tomó la decisión de ponerle punto final, siendo que Diego se hizo cargo del corte, expresó: “Yo te hablo por mí, pero el quién dijo a quién, es realmente algo muy íntimo, y es muy de niños decirlo. La decisión estuvo en nosotros, y en una pareja ambos hacen algo para que se rompa”.
“Obviamente que lo sigo queriendo. Uno no deja de querer a una persona de un día para el otro. Amándolo no lo sé, lo aprecio mucho.